12 feb 2024

Color Humano - Color Humano (1972)

En Argentina tuvimos algo así como post hipismo, que fue la continuidad del hipismo de finales de los 60s pero traído al país para ser recreado algunos años más durante los 70s, incluso años posteriores también. La psicodelia en los Estados Unidos e Inglaterra comenzó alrededor de 1966, con un desarrollo y ejemplos prototípicos incluso más tempranos, pero en argentina tuvimos algunos de los primeros ejemplos discográficos importantes dentro de estos sonidos recién en 1969, para establecerse más especialmente durante los primeros años de la década de los 70s. En realidad, tampoco era psicodelia propiamente dicha, porque el rock argentino de la época siempre tuvo bastante personalidad como para recrear sus propias visiones y poética y no copiar de molde lo que tomaban del extranjero, sin dejar de lado el hecho de que la obsecuencia a la tendencia es de alguna manera u otra un tópico siempre presente en la psique humana, o por lo menos del artista contemporáneo a la misma.

Por otra parte, sí era psicodelia, a la argentina, pero psicodelia al fin, con un efecto amortiguado por el ambiente cultural local: las influencias culturales regionales, las represiones militares que marcaron las visiones de los artistas del país, y el avanzar mismo del tiempo que hace que la influencia se mueva y modifique de acuerdo a las novedades del momento en la escena artística. Con todo ello, bandas argentinas como, por ejemplo, Billy Bond y la Pesada, recrearon y tomaron mucho de la filosofía hippie, sus discos, con sus letras oníricas, experimentaciones instrumentales y zapadas constantes en blues y rock, dan cuenta de ello.

Color Humano parece haber vivido ese efecto también, con composiciones áureas de rock, entre canciones con buenas melodías y pasajes, letras cósmicas que le hablan al sol, y proyectos musicales muchas veces conceptuales o que responden un motivo artístico común que enarbola toda la producción de la banda bajo un aura de luz rockera. El primer disco de la banda, el homónimo ‘’Color Humano’’, de 1972, es un asunto serio, con búsquedas de un sonido con el que parecen haber encontrado alguna cosa que no puede palparse y abarcarse, pero que está allí, en el sonido del grupo, como viniendo de algún lado y disimulándose entre la instrumentación.

‘’¡Larga vida al sol!’’ proclaman mientras el grupo se pierde dentro de un aura misteriosa, de guitarras provenientes de otro espectro, una evolución estructural que hace de la misma una exploración, letras oníricas, estamentos de luz, búsqueda proto progresivas, o progresivas en sí, y buenas zapadas que dan cuenta que estaban a la altura de los sonidos de la época y que a su vez eran muy buenos músicos. De alguna manera en el disco aparecen algunos motivos comunes de los discos hippies de la época, entre zapadas en temas extensos de 10 minutos mínimo, canciones acústicas, poesía en letras oníricas, experimentación con alucinógenos, experimentación con estructuras, sonidos y texturas. Habían bebido de esa fuente, pero la habían cortado con un poco de cultura argentina, que no dejaba de ser la contracorriente hippie, pero bajo las condiciones sociales, políticas y económicas locales, y bajo los recursos con los que se contaba.

En este primer disco la banda experimenta un poco con la composición en temas de rock bien ornamentados y con desarrollos de elaboración, no se trata de simples canciones sino de piezas de rock que cuentan con búsquedas bastante esmeradas que incluyen muchos elementos en su haber, pasando por varios pasajes internos y progresiones internas. Una de esas piezas es ‘’Humberto Azulado De Azul’’, un tema de rock pesado, psicodélico, extendido con una sesión de improvisación interna, por lo que la pieza alcanza la duración de diez minutos de duración. Otro tema similar en el disco es ‘’Silbame Oh Cabeza’’, que también cuenta con una búsqueda instrumental interna, entre arreglos de bajo y motivos finales que dan fin al tema.

Aunque él momento del disco, el corazón sangrante del disco, es el mítico ‘’Larga vida al Sol’’, una pieza que marca más especialmente este costado áurico del disco, su sentida letra, su composición particular, e incluso el sonido que se obtiene de la guitarra eléctrica, dan cuenta de una pieza única en su época, con mucho carácter místico, mucha estirpe del hipismo argentino de la época que muchas veces hacia referencia a lo invisible en sus canciones y formas de vida, generándose entre los músicos y artistas de la época algo así como cofradías y grupos, agrupaciones que se reunían bajo el aura del arte y las búsquedas espirituales. ‘’Larga vida al Sol’’ comienza con unos rasgueos misteriosos, como anunciando un ingreso hacia algo, o un misterio que busca salir en forma de música, el sonido de la guitarra en el tema aporta gran parte de ese efecto y comanda al trio de músicos, y al oyente, a un viaje como pocos en la época, incluyendo canción, incluyendo viajes progresivos, incluyendo momentos extraños y poesía.

Otra pieza interesante aquí es la ‘’Introducción Polenta’’, una pieza instrumental que paradójicamente por su nombre cierra el disco, y que podría decirse que es ‘’progresiva’’ por su elaboración, ya que no es una canción sino una incursión instrumental con pasajes que avanzada y momentos que progresan y no se detienen en la repetición de alguna estrofa o estribillo. El disco se completa con dos piezas ‘’acusticas’’, la bella ‘’Padre Sol, Madre Sal’’, una bella canción en la que participa la cantante argentina Gabriela. Por otra parte, la pieza ‘’acústica’’ ‘’Después Del Hachazo’’, otro momento solo de guitarra bastante particular y que está al tono de la experimentación del grupo.

Tres son los lanzamientos discográficos que dejó la banda tras sus años de vida. Para el segundo lanzamiento la agrupación había preparado un lanzamiento de doble LP, pero por cuestiones de negocios el disco se dividió en dos, formándose así el ‘’Color Humano 2’’ de 1973 y ‘’Color Humano 3’’ de 1974. La banda para este primer lanzamiento estuvo formada por Edelmiro Molinari en guitarra y voz, coros, piano en "Introduccion Polenta", David Lebon en batería y coros, y Rinaldo Rafanelli en bajo, coros, órgano en "Introducción Polenta".

Cod: #1758

5 feb 2024

The West Coast Pop Art Experimental Band - Vo. II (1967)

El segundo lanzamiento del grupo, el volumen II, es un poco más ambicioso que el debut discográfico de la banda, incluso con incursiones un poco más adentradas a la psicodelia experimental en sí misma. Podría parecer que este segundo trabajo tiene un aire de obra conceptual, con el particular ‘’In The Arena’’ que funciona a forma de apertura del disco y que, a su vez, a la mitad del disco aparece otro separador conceptual, la ‘’Overture’’ que da pie al comienzo de la parte segunda del trabajo. 

Hoy en día parece obsoleto el concepto de ‘’parte 2’’ de un disco debido a que las publicaciones se piensan en formato cd (aunque el vinilo está volviendo a ser tendencia), por lo que esa obertura fue pensada para el disco siendo publicado en un LP que debía darse vuelta en la bandeja para poder apreciar el segundo lado y que este mismo comenzaba con una obertura. Una belleza conceptual y todo un ritual de escucha con el que cuentan muchos discos conceptuales de la época.

Publicado en 1967 en ‘’Reprise Records’’ como continuación de la primera parte, el Vol. II es un poco más entretenido que su antecesor, especialmente para los interesados en sonidos algo experimentales dentro de la psicodelia y el rock psicodélico. El álbum abre con un track conceptual y continua, durante la primer parte del disco con tres piezas bastante interesante, entre las que aparece la peculiar ‘’Supongamos que nos traen una guerra y nadie se presenta’’, un tema en forma de protesta a las guerras de la época, que en realidad copia citas directas de un discurso de Franklin Roosevelt el 14 de agosto de 1936 en Chautauqua, Nueva York. 

Tal vez sea un cliché para algunos esto de las protestas contra la guerra en aquella época hippie, pero en realidad todas las generaciones y géneros musicales tuvieron sus clichés, incluso hasta los supuestos más ‘’elevados’’. Todos los géneros fueros cuestionados, revisados y repuestos desde una visión de reconstrucción que replanteaba los mismos sonidos, pero desde visiones que rompían las formas armónicas, melódicas, etc.

En este segundo álbum de la banda parece ser más llamativo el primer lado del mismo, con piezas muy interesantes. Ya incursionando sobre la segunda parte del trabajo aparecen algunas piezas que tratan de continuar por la senda experimental, tal vez no con buena forma en la primera parte, aunque ‘’Carte Blanche’’ es una interesante pieza de rock psicodelico con buenos solos de guitarra distorsionada. Lo mismo ocurre con ‘’Unfree Child’’ que cuenta con una oscura introducción y un agradable desarrollo de la canción.

La banda publica tres discos en su historia, los correspondientes Vol. I, Vol. II y Vol. III, considerados a menudo como una evolución del grupo en cuando a lo entretenido y psicodélico respecta progresivamente, muchos consideras sun Vol. III como el mejor de todos.

Esta banda estadounidense es formada en Los Ángeles, California, en 1965, y compuesta por Michael Lloyd, Danny Harris, Shaun Harris y John Ware, originalmente llamados como Laughing Wind. En una fiesta organizada por Bob Markley, un hijo de un magnate petrolero, fue el mismo Markley quien propuso a Laughing Wind la posibilidad de ser producidos y financiados, económicamente, con la condición de que fuera el mismo Markley otro miembro de la banda. El grupo no recibía de buena manera las excentricidades y esnobismos de Markley, pero parecen haberlo tolerado a cambio de la financiación de sus discos.

Es un álbum que no está al tanto de la escucha popular de otros discos más conocidos de la época, pero que de todas formas son discos que tienen cierta reputación entre la psicodelia y que suelen aparecer entre las listas de buenos discos del momento. Psicodelia y rock no le falta, buenas zapadas y experimentación tampoco, luego será responsabilidad de cada uno el uso que se le da al mismo al acercarse a estos experimentos que no alcanzaron el maistream pero que proponen sus conceptos interesantes, consumir preferentemente bajo el cuidado de un adulto responsable.

Cod: #1757

2 feb 2024

Bit 'A Sweet - Hypnotic 1 (1968)

De los bajos de la escena neoyorkina surge Bit 'A Sweet, un fugaz proyecto compuesto por el tecladista Dennis DeRespino, el baterista Russell Leslie, el bajista Mitch London y el guitarrista Jack Mieczkowski, y con la mente impulsora de Steve Duboff en el trasfondo del sonido. 

En 1967 al grupo publica su primer simple con MGM y debuta con el sencillo firmada con MGM, la banda debutó con el sencillo de 1967  ''Out of Sight Out of Mind'' y ''Is It On - Is It Off?. Uno de los logros de este simple es haber aparecido su música en la película psychploitation ‘’Blonde On a Bum Trip’’ de Raf Mauro. Además de que la banda tuvo un cameo en la película tocando ''Out of Sight Out of Mind'' en la escena de un club.

El único álbum del grupo, ''Hypnotic 1''. fue lanzado en mayo de 1968, una agradable mezcla de pop psicodélico con un carácter general alegre, temas llevaderos y que conducen hacia una buena variedad de propuestas dentro de un pop/rock psicodélico rico en melodías pegadizas y enriquecido con buenas composiciones. 

Steve Duboff (que también trabajó con The Cowsills, The Monkees, The Insect Trust y otros) es el encargado de la producción de las canciones y ese es otro campo en el que se destaca el disco, en su esmerada producción de estudio con la que cuenta, un sonido bellamente producido para funcionar con interesantes detalles, llegando a aparecer sitares, arreglos de cuerda, efectos electrónicos tempranos, arreglos corales, introducciones/conclusiones, etc.

Es un trabajo de rock pero edulcorado con una dosis predominante de psicodelia popera bastante pegadiza que abraza la producción y la vuelve agradable al oído sin caer necesariamente en ningún cliché, es más, la producción hace que el sonido se acerque a aires de experimentación y psicodelia propiamente dicha.

El carácter de las composiciones y la forma en la que encararon los ritmos vuelve al sonido con una buena dosis de groove alegre y pegadizo, ya que muchos de los temas cuentan con este carácter y se vuelven fáciles de bailar (siempre al estilo de la época) y fáciles de tararear. Una tarea bien lograda y un groove general que se vuelve un gran acierto, temas como ‘’How can I make you see’’ dan cuenta de ello.

Las canciones no defraudan en ningún momento, son cortes pegadizos que destacan por su buen sonido de época, buena ornamentación, un trabajo entretenido de escuchar en su mayoría. Algunos acercamientos a la lisergia con temas como ‘’With Love’’, que cuenta con voces alteradas y sonidos ácidos, un corte pop digno de grandes bandas. ‘’Speak Softly’’ otro corte que llama la atención, con arreglos corales y de cuerdas, abre el disco con justicia. Sumado a esto la versión movida que hacen de ‘’If I needed Someone’’ que se complementa en el disco de manera indicada.

El disco no tuvo grandes éxitos en las listas de la época ni en ventas por lo que el grupo pronto se separaría, pero el trabajo debió conocer mejor suerte, con muy buenas composiciones y buena producción todo en gran medida por Steve Duboff, un trabajo que podría hipnotizar y llamar la atención de inmediato a cualquier amante de la psicodelia de la época. Y si buscan psicodelia escuchen el tema del disco ‘’A Second Time’’.

Es disco da por tierra a muchos trabajos de ‘’mayor porte popular’’, y que lamentablemente no contó con el éxito que debió contar, otra perla más de la psicodelia de la época que siempre sorprende con grandes producciones y sonidos de vanguardia. Esta época marcó la escucha de muchas generaciones y estableció un estándar de composición e imaginación muy alto que debió ser respondido por las siguientes generaciones con obras mucho más desafiantes, para responder a ese desafío artístico de sus antecesores de la contracultura.

Cod: #1756

22 ene 2024

101 Strings - Astro Sounds From Beyond The Year 2000 (1969)

Cuando un emprendimiento artístico se desarrolla a lo largo de varios años y su carrera discográfica suele alcanzar la era psicodélica en su camino, se puede apreciar ese fenómeno de que debían volverse hacia las tendencias para vender, por las portadas multicolores que debían presentar en sus publicaciones de por aquellos años. En realidad, para que una propuesta musical tenga éxito comercial asegurado debe, aunque no excepcionalmente y ni en todos los casos ocurre esto, procurar estar bien adaptada a los tiempos que corren, por lo que la propuesta de esta orquesta siempre estuvo entre los moods de tendencia. Hasta que llegaron a la era psicodélica y no tuvieron mas remedio que agregar a su sonido tradicional algunos otros elementos como baterías, ritmos de rock, guitarras distorsionadas y demás elementos del momento.

Estaban ubicados en la era de la carrera espacial y las luchas de los poderes por demostrar quien supuestamente llegaba más lejos con sus cohetes en el espacio, esto repercutió en la cultura musical ya desde los años 50s con algunos discos de lounge e easy listening de tipo ‘‘Music In Orbit’’ de 1958 o ‘’Fantastica: Music From Outer Space’’ también de 1958, broma que afortunadamente terminó transmutándose en la música cósmica de krautrock o hacia la rama espacial del rock progresivo, entre otros.

En el medio de todo ello estuvo la corriente del easy listening que luchó por sobrevivir durante algunos años más, durante la psicodelia y las búsquedas cool de la música moderna, con motocicletas con forma de cafetera y la mediocridad de la vida moderna reformada para seguir vendiendo. A todo esto, la música de fácil escucha también fue importante para este fenómeno, la corriente maistream de la moral tuvo que teñirse de multicolor para sobrevivir (justo exactamente como hoy en día ocurre), apareciendo experimentos como estos en los que las ultimas orquestas del genero hicieron de las suyas.

‘’Astro Sounds From Beyond The Year 2000’’ de1969 es otro de los intentos psicodélicos de la orquesta de easy listening 101 Strings, siendo ‘’Sounds Of Today’’ de 1967 el aparente primer intento hacia esos lugares. Las propuestas de la orquesta generalmente trataban de reinterpretaciones de éxitos populares en refritos easy listening. Es ‘’Sounds Of Today’’ hicieron lo susodicho con todos éxitos de rock de la época, y en este disco ‘’Astro Sounds From Beyond The Year 2000’’ en principio parecieran presentar versiones de autoría propia.

En realidad, no parece que hubieran vendido mucho con este disco ni que les hubiera significado un gran negocio, pero es ahí donde se puede encontrar la acepción y dar lugar a algunos sonidos que, aunque en modos de muy fácil escucha, están teñidos con algunos elementos psicodélicos, orquestación y algo de experimentación, fenómenos de los que a veces suelen brotar fusiones o inventos interesantes. Es música fácil de encarar, con ritmos percusivos siempre constantes y por ende llevaderos, arreglos de cuerda característicos de la orquesta, pero adaptados para funcionar en un formato de rock, por lo que tiene algún merito por haber usado toda una orquesta y no un mellotrón emulándola. 

Toda la producción musical del disco es fácil, de fácil escucha, orquestada en su totalidad, con moods y propuestas sencillas de no más de un par de minutos cada track, con baterías, algunas guitarras, sonidos que buscaban ser más tendencia que la tendencia misma, y tal vez no lo lograron en ventas, pero la pretensión está propuesta en el disco y hay varias cosas que suenan interesantes. No termina de haber una exploración hacia algún terreno particular en lo que la extensión pudiera significar, son solo un puñado de piezas concisas y al pie, cortas y tan pretenciosas como el par de minutos por canción les pueda permitir.

Un detalle, detrás de este lanzamiento estuvo el sello ‘’Alshire’’ que publicó ese mismo año el disco homónimo ‘’The Animated Egg’’, con una banda llamada de la misma manera y habiendo sido creada para funcionar como proyecto de estudio que buscaba inmiscuirse en la psicodelia y obtener réditos comerciales de ello. Lo particular de esta anécdota es que, siendo un sello casi dedicado a la búsqueda comercial per se, las piezas que aparecen en ‘’Astro Sounds From Beyond The Year 2000’’ suenan muy similares a los nombrados amigos de Animated Egg, de hecho, son exactamente las mismas, pero recreadas en una suerte de sampleo con recortes y reimpresión de arreglos de cuerda de la orquesta encima. 

El intento de psicodelia, combinado con algunos sonidos experimentales, junto con el sonido de una orquesta, da un resultado final interesante y que aún hoy en día suele agradar a mucha gente, especialmente amantes de la psicodelia. En realidad, se trata de un refrito de una producción del mismo sello discográfico, retocado con grabaciones de la orquesta para reformularla y proponer algún tipo de ‘’nuevo sonido’’ o ‘’sonido moderno’’. Un invento al que alguien le pareció que a los oyentes de la orquesta estarían listos para dirigirse hacia ese nuevo camino moderno para la época, el invento está y hay cosas interesante aquí para escuchar.

Cod: #1755

19 ene 2024

Kali Bahlu - Kali Bahlu Takes The Forest Children On A Journey Of Cosmic Remembrance (1967)

He aquí otra incursión en el mundo de la fusión con elementos orientales, aunque esta vez se trata de un experimento mayor, con música no reducida a una serie de canciones propiamente dicha sino ya más volcada hacia la experimentación misma, tanto es así que el disco se divide en cuatro extensas piezas, dos de cada una de ellas a cada lado del vinilo original de época. Esta es una extraña obra musical típica de la era hippie pero que incluso resalta entre los elementos más experimentales. Aquí hay sitares, tablas y tampuras hindúes, por lo que la remembranza hacia ese mundo exótico está al corriente en todo el disco y da esa cuota mística de viaje cósmico por la mente y sus extensos interiores.

Aunque eso no es todo lo que ocurre. A lo largo de las cuatro piezas del disco se presenta un viaje por tierra indeterminadas, dirigidas por una voz femenina semi cantada semi hablada, en un trabajo cuasi spoken Word, que recita sus delirios inentendibles a lo largo de todas las piezas, mientras algunos ruidos ocurren por detrás que dan un aire de vanguardismo experimental. La psicodelia está al orden del día, por la voz femenina recitando delirios y por el ambiente que en conjunción de todos los elementos se termina de crear, por lo que el happening delirante de místicas acidas no se deja de esperar, todo el disco es un viaje en sí, para eso fue diseñado.

‘’Kali Bahlu Takes the Forest Children on a journey of Cosmic Remembrance’’ es el nombre elegido para este delirio generalizado, un viaje guiado por la voz de Kali, que con un virtuosismo locutor recita, canta, rie y delira mientras que a la vez nos cuenta fabulas misteriosas sobre dioses, y otros elementos. La voz es penetrante, intensa, exótica, insistente, etc. Esto podría relacionarse al estilo exótico por el erotismo de la voz femenina al mando, y también algo de eso que suele denominarse vagamente como non-music y que suele estar relacionado a una etiqueta de unifica a trabajo con recitaciones vocales, diálogos y lecturas, como lo hacía también Timothy Leary en sus discos de la época, aunque este último también psicodélico pero con un tenor más filosófico y cuasi científico.

Kali Bahlu pareciera encontrarse en un estado alterado y como en un viaje poseída por una incomprensible euforia de tipo infantil, recitando cosas generalmente incomprensibles, muchas veces sin sentido y otra también sin sentido pero que se dirigen hacia nociones espirituales. Todo el disco es algo monótono en realidad, pese a la experimentación la música está creada para acompañar las recitaciones y pintar los paisajes psicodélicos requeridos por la voz femenina al mando. Esta noción repetitiva es común en este tipo de discos de recitaciones, pero en realidad tampoco deja de ser una interesante incursión por tierras psicodélicas con varios elementos atípicos y una serie de trips instrumentales de fondo que hacen la delicia para cualquier viaje acido.

El disco fue editado en 1967, por el sello World Pacific Records, sello que había editado en 1966 el influyente ‘’Raga Rock’’ por The Folkswingers, y que en 1967 también editó joyas como algunos discos de Ravi Shankar, algunos discos con recitaciones de Maharishi Mahesh Yogi, además del ‘’In India’’ por Paul Horn, por lo que la propuesta de Kali Bahlu encajaría perfectamente en las nuevas visiones del sello para entonces. Aunque por otro lado el sello hizo mella de esta tendencia y la convirtió en lo que en algún momento se denominó como sitarploitation, publicando varios discos con reversiones comerciales y presencias de sitares sin mayores miras que las de intentar vender.

La enigmática Kali Bahlu era una mujer joven al momento de publicar el disco en 1967, aunque desapareció en la historia poco después del lanzamiento de su primer y único álbum, que gracias al sello World Pacific Records pudo llegar a mayor público, siendo una pieza oculta entre la psicodelia más experimental de la época, parte sitarploitation, parte psicodelico, parte disco con recitaciones, un trabajo que tuvo suerte al encontrar su lugar en un sello grande que le terminó de dar vida, y engrosando la lista de joyas que surgieron y murieron al instante, para nacer definitivamente en un contexto de psicodelias y experimentaciones, y para quedar como un registro que es la muestra viviente de la historia al recordarnos lo que transcurría por las cultura de aquellos años.

Cod: #1754

1 ene 2024

Tony Scott - Music For Zen Meditation And Other Joys (1965)

La herencia cultural reinterpretada por las generaciones post segunda guerra mundial, entre ellas la generación beat, con su correspondiente carácter antibélico y su posición rupturista ante las normas morales establecidas, trajo aparejada además la novedad de la aceleración del acercamiento al mundo religioso oriental, tal vez a modo de vía de escape o alivio ante cualquier culpa cultural heredada de sus padres o las generaciones pasadas. El intercambio de posiciones culturales sublimándolas a modo de una supuesta liberación trascendental es un mecanismo propio del ser humano que, cargando con su condicionamiento acumulado por años, lo que provoca una consecuente superstición al no comprender la prisión mental que por sí mismo se ha creado, se proyecta hacia imágenes o alivios de supuesta ‘’elevación’’ para buscar así la felicidad que no se obtiene en la vida dura y mecanizada de la cotidianeidad.

A todo ese misticismo, la generación juvenil contracultural posterior a lo beat, la generación hippie, lo tomó, lo incrementó y continuó durante algunos años más. En realidad, en su época fue un posicionamiento de tendencia, pero ello marcó un nuevo enfoque (con influencia sobre el krautrock, sobre lo ‘’space’’ y demás estilos progresivos ‘’etéricos’’) para la formación del posterior carácter del new age, y para la conformación del ánimo general del hippie contemporáneo, siempre cercano a visiones de sutil religiosidad introspectiva.

The Beatles habían acelerado esa presencia hippie en la palestra publica con trabajos sucesivos como ‘’Rubber Soul’’ de 1965, ‘’Revolver’’ de 1966 y la irrupción del célebre ‘’Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band’’ de 1967, impulsando al rock y la psicodelia y haciéndola llegar a oídos de todo el mundo y de todos los géneros, y acelerando además la presencia cultural y religiosa de ‘’lo oriental’’ y ‘’lo místico’’ en la música popular, con presencias de sitares, tablas y demás instrumentos orientales en temas que marcarían a fuego la cultura popular de la época, como ‘’Norwegian Wood’’, ‘’Tomorrow Never Knows’’ y ‘’Within You Without You’’, aparecidos correspondientemente en los nombrados álbumes publicados por The Beatles. Otras bandas de rock también harían cosas importantes en este terreno: ‘’See My Friends’’ de 1965 por The Kinks, ‘’Heart Full of Soul'' de 1965’’ por The Yardbirds, o ‘’Sunshine Superman’’ de 1966 por Donovan, son solo algunos otros ejemplos tempranos en contener la aparición del sitar en su instrumentación y de ser fundadores de esa fusión entre el rock occidental y la música del sur de la India, que un par de años más tarde seria apodada como ‘’raga rock’’.

El jazz también dio de qué hablar con su presencia en este campo de irrupciones de músicas orientales en occidente, especialmente con la célebre formula del East Meet West. El primer ejemplo importante que integra músicos de jazz con músicos del sur de Asia fue ‘’Improvisations’’ de 1962 de la leyenda del sitar Ravi Shankar, con los flautistas Paul Horn y Bud Shank, el bajista Gary Peacock y el baterista Louis Hayes, junto con varios músicos de acompañamiento indostaníes. Este trabajo silenciosamente fue pionero ente terreno.

En este campo fértil de fusiones e irrupciones culturales en escenas artísticas disimiles, se puede hablar también de la irrupción de las primeras nociones musicales del new age en la época y por ende un mayor acercamiento de occidente a la espiritualidad, generalmente ligada a la cultura hindú y/o también en la cultura religiosa general de oriente. Entre la psicodelia y el posterior progresivo espacial, e incluso entre la rama kosmische musik del krautrock y el jazz de vanguardia, se ubican los primeros trabajos de lo que se puede considerar algo así como new age temprano. Según visiones u opiniones, los primeros álbumes de new age se ubican entre ‘’In India’’ de 1967 por Paul Horn, ‘’Dawn’’ de 1969 por Don Robertson, o ‘’Spectrum Suite’’ de 1975 por Steven Halpern

Y entre esa época temprana del new age aparece un álbum que ya desde 1965 marcó una tendencia importante, además de ser un puente temprano entre oriente y occidente pre-psicodélico, el llamativo ‘’Music for Zen Meditation and Other Joys’’ de 1965 por Tony Scott, un trabajo que por su instrumentación y su profundo acercamiento a la espiritualidad budista, se adelanta a la psicodelia y por muchos años al new age propiamente dicho, de hecho el disco es denominado como el primer lanzamiento discográfico de new age.

El clarinetista Tony Scott fue un musico importante de la escena jazzera de Nueva York de los años 50, habiendo tocando junto a figuras Thelonious Monk, Charlie Parker, Billie Holiday y Miles Davis. Pero hacia el final de la década su labor dentro del jazz comenzó a declinar, por la evolución misma de su género en cuestión y por una sensación interna que lo llevó a buscar más allá de los confines musicales que conocía. Desde que dejó Nueva York en 1959, Tony Scott (un destacado clarinetista orientado al bebop) ha sido un entusiasta viajero por el mundo que disfruta explorando la música folclórica de otros países. Desafortunadamente, sus grabaciones posteriores a 1959 han sido pocas, distantes entre sí, difíciles de localizar y, a veces, erráticas, pero Scott fue un pionero no anunciado tanto en la música mundial como en la nueva era.

En 1959 deja Nueva York y se muda a Japón, donde, gracias al escritor de jazz japonés Mata Sagawa, logra establecerse y comenzar no solo a trabajar sino también a estudiar las músicas regionales, no solo de Japón sino de varios lugares de Asia, visitando países como Filipinas, Corea, Malasia, Indonesia y Tailandia. Experimentó con la balinesa del gamelán y tocó arpa y flauta javaneses. Estudió la música clásica tradicional de Japón y leyó sobre los monjes zen. El desarrollo tarde o temprano lo llevaría a un punto clave. Si bien sus grabaciones de la época, hasta entonces, habían recorrido prácticamente el jazz solamente, ahora comenzaría una nueva etapa en su carrera, fusionándose con estilos de otras culturas, y haciendo incluir su clarinete que en la escena de Nueva York había quedado relegado ante la nueva primacía del saxo y la trompeta, ahora su clarinete había encontrado un nuevo lugar en la música asiática, especialmente en el estilo japonés.

‘’Music for Zen Meditation and Other Joys’’, de 1965, retrata su experiencia de la época, fija nuevos estándares para la época, revitaliza el rol del clarinete, creando una música especifica para la meditación, porque, en aquella época, en los templos sólo se escuchaba música religiosa y gagaku (música de la corte japonesa). Scott propuso grabar con dos maestros japoneses: Hozan Yamamoto con la flauta shakuhachi de bambú y Shinichi Yuize con el koto, el instrumento pulsado de 13 cuerdas. El trío improvisó íntegramente en escalas japonesas clásicas. La música no contenía forma ni resolución de canción, solo un lento enrollamiento de flauta y cuerdas alrededor de la sutil línea lírica. Como no existe ningún instrumento como el clarinete en la música folclórica japonesa, Scott tuvo que inventar una voz que coincidiera estrechamente con las cualidades tonales y los patrones de respiración del shakuhachi de Yamamoto.

El resultado musical de este trio es un trabajo atemporal, con piezas instrumentales de carácter calmo y exploratorio en la que los músicos se pierden en un ambiente de solemne búsqueda invisible, conjugándose muy bien entre sí, dejando lugar para que cada instrumento tengo su lugar, improvisando a la perfección, y estando el balance todos los instrumentos por lo que los tres ejecutantes tienen su lugar justo en el sonido. Todo el carácter musical del disco es de calma, la música es serena, no invasiva, permite desarrollarse en un espacio de tranquilidad en la que la actividad o lo que se esté haciendo tenga su lugar sin ser invadido o molestado. El carácter música que recobre el sonido es entendible debido a que fue creado en Japón y especialmente para musicalizar el ambiente religioso de meditaciones en los templos locales. Para ser una obra grabada en 1965 no parece tener perdida de vigencia y es difícil ubicarla en el contexto de su época. Otro acierto de Scott fue que su habilidad en su clarinete lo hizo ideal para esta tarea, además de que su instrumento, sonido y forma de tocar fascinaron a los músicos japoneses por su similitud a una flauta shakuhachi.

Cod: #1753 

15 oct 2023

The Holy Ghost Reception Committee #9 - Songs for Liturgical Worship (1968)

Otra interesante perla dentro de lo que es la psicodelia rock cristiana es el material que en su época publicó la agrupación de The Holy Ghost Reception Committee #9. Este quinteto psicodélico cristiano fue una creación de Anthony Myers, un maestro de la Escuela Secundaria Regis de la ciudad de Nueva York, asignado alrededor de 1967 para trabajar con estudiantes para escribir e interpretar canciones de mentalidad contemporánea que pudieran tocarse en Misa. Estudiantes de entre 15 y 16 años fueron alentados y reunidos por Meyer para realizar este proyecto quien reunió a un grupo de músicos provenientes de la escuela: Dennis Blair en bajo, Bob Kearney en guitarra, Mark Puleo en guitarra solista y Larry Johnsen en bajo y órgano. Todas las canciones son originales, pero muchas fueron escritas por estudiantes que no estaban en la banda real. El hecho de que los compositores e intérpretes tengan sólo 15 y 16 años aumenta la maravilla de lo que han logrado.  

El proyecto tuvo éxito y Myers consiguió un contrato de grabación con la editorial ecuménica Paulist Press, y en 1968 el grupo pudo publicar su primer LP. Este primer del grupo se llama ‘’Songs for Liturgical Worship’’, y es exactamente de eso de lo que se trata, música religiosa creada para evangelizar y llevar un mensaje religioso. Este fenómeno litúrgico se suma al ya sentido místico de la psicodelia, por lo que es resultado termina siendo una música con un aura mística propia y prístina, a lo cual hay que sumar el regular resultado de grabación devenido de condiciones en las que fue grabado el material originalmente, dando ese toque de bajo sonido garagero, con algunas canciones pegadizas, y un acercamiento sutil a la psicodelia con el agregado de algunos elementos particulares como algunos sonidos de instrumentos como los órganos, algún que otro efecto agregado, o la calidad general del sonido.

La calidad de las canciones es acertada, no necesariamente una joya perdida o una obra maestra, pero es una pieza interesante para tener en la colección de la ‘’Xian Psych’’ con letras que aunque sean en ingles denotan inmediatamente sus intenciones religiosas, hablando sobre la fe, la verdad y la salvación, y que a la vez, sorprendentemente, hacen referencias inesperadas a Vietnam, el racismo, los derechos civiles y otros temas de protesta popular de la década de 1960. Se mencionan el LSD, el napalm y el KKK. 

Musicalmente se trata de una música rock suave pero oscura, con trazas de folk rock, pop, y rock garagero sesentero. Algunas de las canciones son rockeras y otras tienen un sonido más introspectivo. Las guitarras eléctricas y el bajo lideran el camino, con un toque de teclados y percusión. 

Se dice que supuestamente estos jóvenes probaron alucinógenos y gustaban de la música de los Beatles, lo cual tiene cierto sentido, algunos títulos de canciones y letras son bastante delirantes, y ni hablar de la portada que es un ponche acido que invita al delirio. Si la misión religiosa es captar la atención de la gente, especialmente de los jóvenes, y tratar de que se sumen a su causa, una buena manera de llevarlo a cabo en aquella era época producir una música ‘’contemporánea’’, y la música moderna del momento era el rock y la psicodelia. 

Así nacieron todos los experimentos de estos grupos y sus respectivos lanzamientos discográficos, como un intento de evangelizar, tratando de captar la atención de los jóvenes con un sonido seductor para el gusto del momento. Podría criticarse esta acción de obsecuente pero lo cierto es que de todos estos discos generalmente han quedado artefactos interesantes, experimentos oscuros, y búsquedas cancioneras con interesantes creaciones melódicas.

En 1969, tras el lanzamiento del segundo disco, "The Torchbearers", el grupo se disolvió. En general, tenemos dos álbumes creados en las mejores tradiciones psicodélicas de finales de los años 60, con un sonido único y letras profundas, que no pueden dejar de sorprender, considerando la edad de los músicos entre 16 y 18 años. Quizás no se trate de obras maestras pero las circunstancias envueltas en las creación de los mismos y la peculiaridad entre la fusión entre psicodelia y cristianismo hace que estos discos sea curiosidades muy interesantes.

Cod: #1752

13 oct 2023

The Fugs - Sing Ballads Of Contemporary Protest, Point Of Views, And General Dissatisfaction (1965)

Entre los orígenes prototípicos de la psicodelia aparecen algunos personajes y bandas que hicieron de las suyas en épocas germinales, entre el comienzo del uso de alucinógenos de forma masiva, el contagio entre los jóvenes por la adopción de la actitud contracultural, o el acercamiento a estilos vanguardistas y rupturistas, siendo The Fugs otro de esos conductores entre las generaciones anteriores hacia el trocar rumbo a la psicodelia ya bien formada de 1966 y 1967. Además, The Fugs reflejó algunas actitudes adoptadas en los próximos años por los hijos de la flor, con esa dosis de aquelarre descontracturado, contestatario, político, en una música con poca identidad hacia algo ya existente y que nace de ese espíritu creativo de esa época en la que se crearon varios géneros musicales.

Los miembros fundadores del grupo fueron dos jóvenes intelectuales llamados Ed Sanders y Tuli Kupferberg, dos bohemios estudiosos de literatura, músicos, artistas y emprendedores que se conocieron en Nueva York y se codearon con la crema intelectual hippie de la época y la zona. Ed Sanders había fundado su tienda llamada ‘’Librería Peace Eye’’, en la cual celebraban hapennings con los círculos intelectuales de la ciudad. Muy cerca del local de Sanders vivía Tuli Kupferberg, un héroe beat que apareció en antologías como The Beat Scene y que publicó varias revistas. A los hapennings organizados en la ‘’Librería Peace Eye’’ solían concurrir personajes tales como Andy Warhol, y literatos tan diversos como William Burroughs, George Plimpton y James Michener. Fue en ese ambiente que Sanders y Tuli Kupferberg se hicieron fervientes amigos y fundaron a The Fugs, lugar donde también hicieron la primera presentación en publico de la banda, junto a Steve Weber y Peter Stampfel de Holy Modal Rounders, que eran amigos y acordaron actuar en la gran inauguración de la librería, en 1965.

El primer álbum del grupo, lanzado originalmente bajo el título ‘’The Village Fugs Sing Ballads of Contemporary Protest, Point of Views and General Insatisfaction’’ por ‘’Broadside Records’’, una subsidiaria de ‘’Folkways Records’’, a finales de 1965, se grabó en dos sesiones de grabación diferentes utilizando instrumentación acústica y eléctrica, respectivamente, interpretadas por dos formaciones diferentes de músicos. La primera sesión de grabación de Fugs, en abril de 1965, contó con Sanders, Kupferberg, Weaver, además de Steve Weber y Peter Stampfel. Algunas de las melodías del primer álbum de Fugs provienen de las 23 melodías grabadas en esta sesión. La segunda sesión de grabación de Fugs tuvo lugar en junio de 1965. Su propósito era crear una cinta de demostración para Verve/Folkways, un nuevo sello. En esta segunda sesión estuvieron Sanders, Kupferberg y Weaver, con John Anderson al bajo, Vinny Leary a la guitarra y Steve Weber. El mismo álbum fue lanzado nuevamente en 1966 por ESP Disk, bajo el nuevo título, ‘’The Fugs First Album’’.

Si la música de The Fugs tiene algún rigor técnico, eso de difícil de decir, eran intelectuales muy formados pero su estilo era conocido por la comicidad y la sátira, por lo que la propuesta musical carece de formalidad para pasar a ser un delirio en sí mismo. El canto es informal, los arreglos se entrecruzan y parece ser un caos generalizado, un aquelarre. Muchas veces se los tilda como una de las primeras bandas de rock underground. Seguramente sobre estos fenómenos morales surja el interrogante del interés artístico y las paradojas creativas que surgían de estos, paradojas artísticas de interés para los buscadores de estilos poco idealizados bajo estándares populares.


Algunos tracks que aparecen en el disco tiene alguna formalidad en cuanto a fusión con estilos tipo country, blues, folk, incluso también de hecho hay algunas melodías interesantes dando vueltas en las pistas, que si hubiesen contado con una formalidad mayor podrían haberse vendido y no ser de un bajo de freaks creativos. Aunque a la vez, hay un fenómeno de intransigencia en todo esto, de no querer pertenecer ni a la contracultura, incluso habiendo nacido en el seno de la misma. Hay un fenómeno instalado en la psique del inconsciente colectivo humano y es el de que en su mayoría la manada se autoidentifica con lo más fácil de escuchar que haya dando vueltas en el momento, y de ahí hacia abajo se comienza a reducir la cantidad de oyentes en la medida que la propuesta musical comience a contener mayor dosis de poesía, o fusiones, o experimentos, o sofisticación, o una mezcla de todo eso, u otros elementos que hagan profundizar el concepto de la propuesta. 

Aunque es cierto que aquella fue una época muy especial, con acercamientos a los aquelarres, las vanguardias, las experimentaciones, las extensas jams sesions en vivo, aun así, hay un punto de inflexión del que no pudieron escapar, el de la autoidentificación de la manada con las canciones románticas (o de otra índole popular) de los iconos pop, y el del correspondiente alejamiento de las músicas de vanguardia por dichas manadas. Aunque el caso de The Fugs sea muy probablemente un fenómeno adrede, sin buscar necesariamente el éxito comercial sino el quehacer artístico sin las pormenorizaciones e inquietudes de la formalidad popular.

En el otoño de 1965, los Fugs emprendieron su primera gira por todo el país, como parte de una protesta contra la guerra de Vietnam, y actuaron aquí y allá en universidades, y mientras estaban en San Francisco dieron conciertos con el gran bardo Allen Ginsberg, los Mothers of Invention, Country Joe and the Fish y otras bandas. Los Fugs entonces estaban formados por Sanders, Kupferberg, Weber y Weaver.

Estas son algunas palabras de Ed Sanders sobre los orígenes del grupo: ‘’Los Fugs regresaron a Nueva York con muy poca posición en el mundo de la música, pero decididos a dejar su huella. Nos sentimos un poco como Rastignac al final de Pere Goriot de Balzac , parados en la cima del cementerio Pere-Lachaise, contemplando París y expresando una determinación de prosperar y sobrevivir. Prometimos vivir de nuestro arte, divertirnos y festejar continuamente y grabar nuestros cerebros.

No iba a ser fácil. Estábamos desafiando al sistema en varios niveles y, sin embargo, estábamos decididos a sobrevivir de alguna manera en el aparato económico del sistema. Sabíamos que habría problemas; de hecho ya hubo problemas. La policía allanó la librería Peace Eye unas horas después de un concierto de medianoche de Nochevieja (1965-66) en el Bridge Theatre. Se apoderaron de ejemplares de mi revista y me arrestaron. La ACLU, para mi eterna gratitud, tomó mi caso, que finalmente gané después de un juicio en el verano de 1967. Comenzamos a actuar en el Café Au Go Go en Bleecker Street en Greenwich Village, donde compartimos cartel con Danny Kalb, Al Kooper and the Blues Project, con la Jim Kweskin Jug Band y con un joven llamado Richie Havens, que estaba sentado inclinado cerca de su guitarra cantando melodías de Bob Dylan, a veces mejor que Bob Dylan.''


Ellos (The Fugs) burlaban de ellos mismo, satirizaban sobre ellos mismos, y celebraban ya desde sus años los credos de los hippies: el sexo libre, las políticas de izquierda, la poesía, la posición en contra de guerra, etc., envueltos en un paquete musical que puede chocar hasta a los despabilados, por su extravagancia propia y porque el uso musical como oyente de estas propuestas tal vez sea raro de abordar y peor aún para los oyentes de hoy en día, salvo por la juventud de la época que se acercaba  ellos con el entendimiento del concepto como fenómeno local, juvenil, y supuestamente innovador, o por lo menos, llamativo.

Esta música se encuentra entre los orígenes del rock, no del rock and roll surgido hacia la década de los 50s, sino del rock sesentero que era una manifestación del encuentro con el blues, elaboraciones más experimentales, fusiones con variedad de estilos y subgéneros locales, y presentaciones de trabajos de conceptos sofisticados. Desde el origen de la década de los 60s hasta promediar la mitad de dicha década, especialmente hasta 1965, el rock surgido hasta entonces y especialmente en relación con lo ‘’contracultural’’ y ‘’freak’’, fue de origen prototípico, germinal, siempre ligándose fuertemente hacia expresiones bizarras como manera de buscar la ruptura de algunas de las formalidades del rock hasta entonces, además de buscar la ruptura del estatus quo moral, político, militar, social, etc. Sin aun la aparición de los iconos del rock sesentero y su influencia psicodélica, lo propuesto por esa generación en esos primeros años roza lo bizarro casi como forma de vida, como una manera de ser no contenida por el embace que luego le ofreció el formato rock cancionero. El rock psicodélico le dotó de una identidad más definida a la música de la contracultura, pero antes de ello, los primeros atrevidos en delirar, lo hicieron en estados expresivos no contenidos, o sea, que carecían de la forma posterior de la psicodelia pero que por ende parecían a la vez manifestarse desde una fuente mucho más pura y directa de la psicodelia.

Hay varias agrupaciones que rondaron ese estilo de dudosa trascendencia artística pero que eran colectivos vivientes que encarnaban de manera viva todos los yeites de su generación y que eran personajes queribles, aunque solo por los integrantes de su generación. Entre ellos, gente como The Godz, Dr. West's Medicine Show and Junk Band, o incluso The Holy Modal Rounders quienes tuvieron relación artística con The Fugs. Un par de años más tarde también David Peel & The Lower East Side hizo lo suyo con música que era casi como un manifiesto viviente de una generación.

Cod: #1751

3 sept 2023

Alan Watts - This Is It (1962)

Una de las razones de ser del hippismo es la tendencia hacia la espiritualidad y la introspección, tendencia estimulada por el uso de alucinógenos y originada en la puesta en boga de filosofías espirituales orientales en occidente. Este fenómeno fue tomado e impulsado por los jóvenes de la época que adoptaron una posición de pacifismo, introspección, inquietud por la amplitud de la percepción, y búsqueda de Dios o lo sagrado. 

Esta tendencia se vio reflejada en la irrupción de algunos personajes de la India en los Estados Unidos, como la aparición de Pandit Pran Nath en Nueva York, la lectura de apertura del Festival de Wodstock por el gurú Sri Swami Satchidananda, o en todo caso también el partir de personas, entre ellos algunos iconos de la cultura como George Harrison, hacia la India en búsqueda de instrucciones espirituales por más maestros gurúes.

El hipismo se apoyó también en las lecturas de algunos autores que aportaron las bases para el pensamiento espiritual del movimiento. Desde poetas de la generación Beat como Allen Ginsberg, Jack Keruac y William Burroughs, el escritor y psicólogo Timothy Leary precursor en el uso de alucinógenos, otro escritor y precursor como Ken Kesey, etc. Y entre las figuras que llamaban la atención a los jóvenes de la época apareció el nombre de Alan Watts.

Alan Wilson Watts (1915-1973) fue un filósofo, escritor, orador, poeta y estudiante británico de religiones. Su mayor insignia fue la de ser intérprete y divulgador de las filosofías asiáticas para el público occidental. Watts fue un orador con fama internacional, pero lejos de eso también tuvo intentos de hacer música, que en realidad no era más que seguir promulgando la cultura oriental, en trabajos de estilo ‘’spoken word’’ con recitaciones filosóficas y relajante música hindú de fondo tipo tampuras o percusiones.

La mayor parte de sus trabajos consistieron en eso y aunque en ‘’This Is It’’ de 1962 también haría lo mismo, sería en este trabajo en el que presentaría algunos aspectos que se reunirían como precursores importantes en la cadena evolutiva prototípica que se conduciría hacia el arte hippie y/o psicodelia alguno año posteriores.

Aquí Watts se reúne con algunos amigos para este trabajo autoproducido en el que se encargan de propiciar el delirio aún más, aquí hay resabios de lo que habían sido y serían los lanzamientos espirituales de Watts, con alguna recitaciones e instrumentaciones, aunque más allá de eso consiste especialmente en el delirio en si mismo y nada mas como medio de expresión. Como todo intelectual bohemio que no hacía música, Watts se dedicó a la libre ejecución y la libre interpretación de la aleatoriedad sonora en sí misma, por lo que aquí no hay canciones ni melodías, solo caos, gritos, instrumentaciones aleatoria, elementos orientales sintetizados en el delirio, y tal vez algo de vanguardia intelectual.

Sin duda ‘’lo oriental’’ de su estilo e influencia están volcados en este emprendimiento, por lo que todo el desempeño y presentación de los tracks tienen un aire de ritual místico, con nombres extraños y ascendencias hacia el entendimiento de alguna cuestión filosófica particular, tipo poesía o predica filosófica hablada.

Este disco tiene un vínculo evolutivo, en cuanto a lo prototípico respecta, con discos psicodélicos tempranos como ‘’Eden's Island’’ de Eden Ahbez de 1960, ''Rebirth'' de 1961 por Gerald Heard, o ‘’The Seal Of The Blue Lotus’’ de 1965 por Robbie Basho, todo de corte temprano, prototípico, filoofico peudo new age, probablemente creados bajo efectos de alucinógenos, y que se cuentan entre la historia temprana del género. 

Por otro lado ‘’This Is It’’ tiene un parecido con discos creados por intelectuales o artistas que no eran necesariamente músicos pero que de pronto se toparon con el delirio creacionista de la época y decidieron aportar su cuota de delirio al caos caomun, entre otro discos como ‘’Hapshash And The Coloured Coat’’ de 1967 por los artistas dieñadores Nigel Waymouth y Michael English, o ''Dedicato a...'' de 1967 liderado por el pintor Mario Schifano.

‘’This Is It’’ presenta algunos delirios tempranos bastante adelantados para lo que implicó la experimentación de por aquellos años y especialmente la experimentación delirante de estilo hippie, y es que lo que presenta en este disco, más allá de que guste o no, coincide en mucho en lo que serían los aquelarres sesenteros más delirantes. Alan Watts tenia, por lo menos, opiniones que no coincidían del todo con lo que era el hipismo y su cultura, habiéndose manifestado algunas veces siendo crítico con el movimiento, aunque irónicamente, con este trabajo, hizo aportes tempranos al género.

Las siguientes son las palabras que venían en la contraportada del álbum original en forma de explicación del mismo:

''ESTE disco no pretende ser arte, música o incluso terapia. Simplemente estamos escuchando a un grupo de amigos, que en ese momento no tenían pensado actuar para un público. Simplemente lo estaban disfrutando, pero no tanto en la medida en que les parecía una lástima no darles a los demás la oportunidad de disfrutar del júbilo que ellos experimentaron. Si se plantea alguna explicación, podríamos citar el último libro de Alan Watts, "The Joyous Cosmology" (Pantheon):

“Nadie está más peligrosamente loco que alguien que está cuerdo todo el tiempo; es como un acero sin flexibilidad, y el orden de su vida es rígido y quebradizo. Las modas y costumbres de la civilización occidental nos imponen esta perpetua cordura hasta un grado extremo, porque no hay ningún rincón aceptado en nuestras vidas para el arte del puro disparate. Nuestro juego nunca es un juego real porque casi invariablemente está racionalizado: lo hacemos con el pretexto de que es bueno para nosotros y nos permite volver a trabajar renovados. No existe ninguna situación protegida en la que realmente podamos dejarnos llevar. Día tras día, debemos funcionar obedientemente como relojes, y los pensamientos "extraños" nos asustan tanto que debemos correr al médico más cercano.

"Para que nuestra cordura sea fuerte y flexible, debe haber períodos para la expresión de movimientos completamente espontáneos, para bailar, cantar, aullar, balbucear, saltar, gemir, en resumen, para seguir cualquier noción a la que el organismo en su conjunto parece estar inclinado. Esta es la razón por la que la asociación libre es una técnica tan valiosa en la terapia de pago; su limitación es que es puramente verbal. La función de los intervalos para las tonterías no es simplemente una salida para las emociones reprimidas o la energía psíquica no utilizada, sino poner en movimiento un modo de acción espontánea que, aunque al principio parezca una tontería, eventualmente puede expresarse en formas inteligibles".

Extraoficialmente, pero en este registro, Alas Watts admite que incluso estos comentarios son todavía demasiado cuidadosos en cuanto a la racionalización, y que nunca puede suceder mientras se convierta en una rutina o se justifique directamente en el mismo ámbito de la salud mental. , integración social, liberación de tensiones, o lo que sea. Sólo se puede hacer para la propia seguridad de uno mismo; cualquier cosa útil para la curación que surja como resultado es siempre un subproducto, no buscado ni intencionado.

Hace más de trescientos años, el gran vidente y místico alemán Jacob Bohme lamentó que "ya ningún pueblo entiende el lenguaje sensual, los pájaros en el aire y las bestias en el bosque sí lo entienden según su especie. Por lo tanto, él debe recuperarse". en el segundo nacimiento. Porque en el lenguaje sensual todos los espíritus hablan entre sí; necesitan otro lenguaje, porque es el lenguaje de la naturaleza.'' ''

Cod: #1750

6 ago 2023

Jerry Solomon - Past The 20th Century (1971)

Hay algunos aspectos que generalmente unifican a los discos de vanguardia o ‘’outsiders’’ en ciertas características comunes: las vanguardias tienen sus propias reglas, reglas inexistentes, o por lo menos planes artísticos tomados de conceptos filosóficos y tratados de vanguardia. Las vanguardias generalmente se publican en discos privados, tiradas limitadas y de forma independiente o bajo sellos muy especializados. Los discos en su tirada original se vuelven santos griales totalmente inconseguibles o con ejemplares raros a muy alto costo. Es música que desafía el convencionalismo y plantea nuevas formas. Muchas veces estos artistas logran generar el culto de un público reducido que ha podido apreciar su arte y/o encontrar en este una belleza alterna pero no por eso menor. Etc.

Jerry Solomon es uno de esos personajes del vanguardismo y la música fuera de corriente. Nació en San Diego, California y vivió en Boyle Heights entre los 1 y los 4 años. Más tarde se mudó a West LA donde fuea la escuela primaria y asistió a Hamilton High. Después de la secundaria, tuvo un trabajo como repartidor de abrigos de piel. Luego se metió en el mundo del espectáculo, cantando, bailando y haciendo rutinas de comedia. Él recuerda: ‘’Cuando tenía 30 años, me dieron maliciosamente una droga peligrosa como una "broma" y sufrí disfunción cerebral y cardíaca. Durante un período de recuperación de diez años, en los últimos años, he recuperado hasta cierto punto mi función anterior y estoy escribiendo un libro sobre mi experiencia.’’

En su disco solista ‘’Past The 20th Century’’ de 1971 hay una decadencia interesante, la música de Jerry Solomon parece música hecha con pocas posibilidades y recursos que había a mano para la ocasión, y el resultado no es muy lejano a eso, una búsqueda musical plasmada en canciones acústicas, con Jerry Solomon como compositor cantante y guitarra, una segunda voz que desconozco de quien será, además de aparecer el sonido de rasgueos de un piano de juguete que se escucha de fondo acompañando al interprete, entre otras percusiones rusticas.

Lejos habían quedado los ritmos tambaleantes de rock & roll de las contribuciones anteriores de Jerry, ahora se trata más de producciones auto gestionadas, tanto desde lo compositivo hasta desde lo orgánico y bizarro de la producción personal de esa música con formas bizarras. La música es irregular, con una producción bizarra ya que tanto el canto, la ejecución, los arreglos, acompañamientos e incluso las composiciones, son muy particulares, una búsqueda desde un lugar alterno para llegar a no se sabe dónde, un ‘’wierdo’’ musical que bien sabe de lo suyo y se amplía en su propio espectro bizarro.

El trabajo comienza con un par de canciones, y a medida que la lista de temas avanza las piezas comienzan a tomar un tenor cada vez más bizarro, apareciendo algunos acompañamientos con juguetes como pequeños pianos de juguete o maracas, las letras impenetrables, además de aparecer cada vez más su voz autosobregrabada y cargada de eco, lo que hace de este wierdo un evento más delirante aun y con eso la belleza de lo peculiar de la presentación se realza aún más.

Al parecer Jerry Solomon financió, escribió, grabó y auto distribuyó su música singularmente fascinante sin más razón que simplemente publicarla. El disco originalmente fue publicado en 1972 bajo el sello propio de Jerry ‘’Fountain Records’’, creado por él mismo para auto gestionar su propia música. En 2018 el disco conoció una primera reedición, por el sello ‘’Modern Harmonic’’, que contiene además material de archivo del propio Jerry. Este disco es un grial interesante entre la música bizarra y under, y por su extraño atractivo y simpleza no deja de generar simpatía, Jerry pareció ser un personaje desinteresado de alguna escena local y sin mayores pretensiones que hacer lo que él bien sabía hacer, una belleza.

Cod: #1749