26 oct 2024

Pat Martino - Baiyina (The Clear Evidence) (1968)

¿Jazz psicodélico? La psicodèlia en sus años mozos alcanzó ciertos coqueteos con muchos géneros, entre ellos la electrónica, las vanguardias o la música sinfónica, y también entre ellos el jazz. Aunque en realidad el jazz ya era algo que andaba dando vueltas por ahí en el caldo común de cultivo del hipismo: como música predilecta de la generación Beat, como un elemento no tan primordial como el rock para el movimiento pero si en ebullición en la época y por ende siendo parte de las miras de muchos jóvenes rockeros del momento, y como una de las tantas decantaciones hacia donde fluyeron los experimentos e influencias que propició la psicodelia. El término ‘’jazz psicodélico’’ puede ser un slogan más de los tantos existentes dentro de todo este caldo primordial de vanguardias rockeras y experimentos aledaños, pero de alguna manera funciona aceptablemente para poder ilustrar en palabras aquella cosa que fue resultado de músicos de jazz acercándose a la tendencia contracultural, o en todo caso resultado de músicos de rock hippie acercándose al jazz.

Es imposible abarcar en una sola concepción lo que podría entenderse como jazz psicodélico, puesto que muchísimos fueron los experimentos que ocurrieron en este fructífero terreno de amalgamas, fusiones e inventos del cual quedaron un sinfín de grabaciones. Como todo estilo psicodélico, el jazz psicodélico, si es que existió algo como tal, tuvo que beber de la cultura de la generación de la flor para poder entender de qué se trataba esa estirpe multicolor de viajes introspectivos, extensas improvisaciones y acercamiento a culturas milenarias. Muchas veces se dice que el jazz fusión se origina del jazz combinado con el rock, pero generalmente se pasa por alto que cuando comenzó a surgir este fenómeno del fusión, el rock se encontraba en su etapa psicodélica y que por ende la psicodelia jugó un rol importante en dicha evolución del jazz. Aunque este jazz también tenía sus miras, con evoluciones previas desde el free jazz, con el comienzo de jazz espiritual, con la llegada de Ravi Shankar y su influencia y acercamiento a músicos de jazz, etc.

El álbum ‘’Baiyina (The Clear Evidence)’’ publicado en 1968 por Pat Martino se encontró en su aparición discográfica entre medio de todos aquellos fenómenos, y sus sonidos no quedaron atrapados en ningún slogan, sino que en el mismo se experimentó mucho, resaltando especialmente que dos de los cuatro tracks del mismo disco son extensas sesiones de improvisación con secciones internas, sonidos de tanpura (instrumento hindú) de fondo en lo que se refleja la influencia de oriente, y el estirpe psicodélico al cual se intenta y seguramente se logra llegar, con ambientes más que de una instrumentación volátil, áurica, cargada de misterio, búsquedas, misticismo, etc.

Se podría tender un puente entre este disco y su relación con algunos estilos del jazz de vanguardia por venir para la época, tanto con el jazz espiritual y el jazz fusión. Es fácil acceder a la relación de este con sonidos espirituales en jazz posteriores logrados por Alice Coltrane, Phaoroah Sanders o Don Cherry. Por otro lado, las extensas sesiones plagadas de misticismo y experimentos dejan una sensación en el aire como de jazz fusión temprano, el jazz está, y la psicodelia también por lo tanto el rock o al menos la influencia de la cultura de la libre improvisación, el delirio y la búsqueda introspectiva.

El álbum es una suite dividida en cuatro pieza, dos tracks por lado del vinilo original de época de 1968, con Pat Martino en guitarra acompañado por Bobby Rose en la segunda guitarra, Gregory Herbert en alto y flauta, el bajista Richard Davis, el baterista Charlie Persip, Reggie Ferguson en tabla y Balakrishna en tampura. En la portada del disco aparece una inscripción que dice ‘’A psychedelic excursion through the magical mysteries of the Koran’’, con una clara referencia a su acercamiento al Corán, libro sagrado de los musulmanes. 

Las piezas del disco llevan nombres de elementos del Corán, incluyendo instrumentos hindúes que dan una sensación psicodélica muy alta en todo el disco, ya que el tanpura aparece de fondo y a lo largo de todo el sonido del disco, sin embargo esta inclusión del tanpura suena algo anticuada y muchas veces parece descompaginada de los demás instrumentos. Aquí hay drones, instrumentos hindúes, extensas improvisaciones en sesiones de extensión, declaraciones de intereses psicodélicos en un sonido proto fusión que aunque a veces anticuado también por momentos con sensaciones de que se está haciendo algo en buena forma para la época pre fusión y con un carácter bastante personal. Los resultados del disco no fueron abiertamente comerciales, es un trabajo con profundidad y un aparente interés y sentimiento por Martino en atreverse a incluir todos estos elementos en una misma cosa.

Al inicio de su carrera el guitarrista estadounidense Pat Martino trabajó para algunos músicos de jazz como Don Patterson, Jimmy Smith, Jack McDuff o Jimmy McGriff, pero hacia 1966 comenzaría a liderar sus propias sesiones y comenzaría a volcar sus propias visiones en sus lanzamientos solistas. Hacia 1968 aparece también otro disco de Martino de declarada influencia oriental, llamado simplemente ‘’East’’.

Cod: #1780

20 oct 2024

Paul Horn - In India (Ragas For Flute, Veena And Violin) (1967)

Así como la aparición del sintetizador Moog y su revolución electrónica tuvieron lugar al mismo tiempo que la era psicodélica, y en muchos casos se vincularon, fue el new age y todo el comienzo del bagaje espiritual oriental en occidente lo que también tuvo su origen prototípico hacia mediados de los 60s, también vinculándose mucho con la corriente hippie. Tal vez el disco por excelencia citado como el precursor en ese terreno de new age sea el temprano ''Music For Zen Meditation And Other Joys’’ de 1965 por Tony Scott, pero hubo otros elementos en la época que también marcaron los momentos prototípicos de esta nueva era.

Si bien ya había habido incursiones de la música hindú en los Estado Unidos, entre discos de fusiones con el jazz hacia finales de los 50s, como por ejemplo los primeros discos del mismísimo maestro del sitar Ravi Shankar publicados hacia esa época, la aparición primordial y aceleración de la invasión de la cultura de la India en los Estados Unidos se dio durante la década de los 60s, con acentuación desde mediados de la misma en adelante, especialmente por su vinculación con la psicodelia hippie. En esos años aparecieron varios discos que se vincularon íntimamente con la contracultura, influenciándola  y retroalimentándose en un cruce de culturas que significaba el llegar de maestros de la India a los Estados Unidos como también el partir de viajeros buscadores o iconos del pop occidental hacia la India en busca de instrucciones espirituales y musicales.

En esa época aparece otra figura clave para los momentos prototípicos del new age y/o de la fusión oriente/occidente, como lo fue el saxofonista, flautista y compositor de jazz neoyorkino Paul Horn, quien fue uno de los que cayó bajo la influencia de la llegada del maestro Ravi Shankar a los Estados Unidos, de hecho Horn participó de la grabación del disco ‘’Portrait Of Genius’’ publicado 1965, del mismísimo Shankar, además de llegar a ser Horn quien introdujo al músico indio a algunos de los músicos más prominentes de Los Ángeles. Bajo la enseñanza de Ravi Shankar, Horn se introdujo hacia las formas y exigencias de la música clásica de la India.

En ese año Horn comienza a desarrollar una predilección particular por desarrollar un carácter étnico en su propia música, gracias a esas experiencias, comienza a experimentar la composición hacia esos terrenos, lo que lo terminaría convirtiendo en una figura importante para futuros géneros y desarrollos. En 1966 Horn viaja a la India para estudiar meditación trascendental, momento en el que aprovecha para incursionar en sus grabaciones con algunos de los músicos más prometedores de dicho país.

Si bien Horn ya había mostrado algún interés por ese costado ‘’etnico’’ o ‘’religioso’’ participando en discos como ‘’ Zen: The Music Of Fred Katz’’ de 1957 por Fred Katz, o publicando ‘’Jazz Suite On The Mass Texts’’ en 1965, es su llegada a India lo que lo haría volcar definitivamente hacia el costado más profundo de su carrera y su carácter personal. Hacia 1967 aparece la publicación de su disco ‘’In India’’, un disco que sigue siendo temprano en muchos aspectos, tanto en su relación con lo ‘’new age’’, como en su participación de la aceleración de la llegada de la cultura religiosa milenaria de dicho país a los Estados Unidos, como también siendo el mismo Horn un personaje que propició dicha llegada ya desde algunos años antes con su cercanía a Ravi Shankar y su trabajo conjunto.

‘’In India’’ representa el comienzo del viaje del artista, ya despegado un tanto del jazz tradicional y del costumbrismo del estilo de vida de Hollywood. El disco significa el comienzo de su viaje, la introducción del artista hacia la música de la India, con un carácter nostálgico y calmo que se desenvuelve en todas las piezas, entre el comienzo del rigor técnico y la fascinación sinsera por alguien comenzando un viaje de autodescubrimiento, además de ser una representación accesible de este tipo de música y una buena manera de comenzar en este estilo. El trabajo cuenta con tres adaptaciones del mismísimo Ravi Shankar de melodías clásicas  especialmente adaptadas para el disco. Las piezas fueron grabadas en Nueva Delhi y cuentan con estudiantes de Ravi Shankar tocando con Horn. Las piezas son relativamente no extensas para lo que suele ser un raga original, pieza de ensueño que no dejan de demostrar el profundo costado milenario de toda esta cultura.

Para la época, el rock había dado de qué hablar con sus incursiones de raga rock y la aparición posterior de este término en 1968. El jazz había hecho lo suyo con su fórmula de east meet west en algunos trabajos anteriores hacia finales de los 50s, y también estaría haciendo lo suyo en ese terreno la música new age, que con su ‘’Music For Zen Meditation And Other Joys’’ de Tony Scott, ya de 1965, marcaría un precedente temprano entre la fusión oriente/occidente, el encuentro de culturas disimiles en una misma grabación y la incursión de una música del otro hemisferio en la cultura occidental. La fascinación de Paul Horn por la cultura de la India y su irrupción en este terreno con sus publicaciones discográficas ya especializadas serían otro peldaño más en la cadena evolutiva que se desarrolló progresivamente entre India y Esados Unidos y que representó un puente musical entre hemisferios disimiles hasta entonces.

Por su parte, a los hippies y bohemios del momento, imbuidos en la cultura de la época entre alucinógenos, búsquedas introspectivas, sexo libre, contracultura y experimentación artística, les cayó muy bien la aparición de la música de oriente que vino a encajar en sus miras hacia búsquedas supuestamente más profundas. Por su parte, a los maestro y músicos orientales les interesó la idea de extender sus fronteras musicales y espirituales al resto del mundo, aunque para estos últimos puede que les haya resultado a la vez interesante como también disímil y complejo de aceptar el tener que incursionar en un mundo de fusiones y comercios que comenzaba a globalizarse cada vez más y por ende sobre el cual podían perder control alguno. 

Hoy en día con internet y redes funcionando de puente, con velocidad inmediata, entre culturas de cualquier lugar del planeta, parece fácil decirlo, pero en aquella época de entre los años 50s y 60s esto recién comenzaba a tomar noción en la cultura universal, con la globalización musical y la repercusión de géneros en las escenas de todas partes, abriendo fronteras, ampliando influencias, aunque también marcando limites, pero además haciendo de la música un algo de consumo universal, la aparición de los discos de larga duración y de los medios de comunicación cumplieron un rol importante en este fenómeno de difusión de culturas disimiles hacia otros hemisferios del planeta. 

Cod: #1779