11 jun 2023

The Last Electro-Acoustic Space Jazz & Percussion Ensemble - Summer Suite (2009)

Este en un disco de un estilo único en su tipo, The Last Electro-Acoustic Space Jazz & Percussion Ensemble es conocida por su estilo de new jazz-funk con un estilo moderno y suave, pero para esta ocasión, su primer trabajo, unieron todas sus ocurrencias en un solo track y es de eso de lo que consta este trabajo, un solo track de, ni más ni menos, cuarenta minutos de duración, una, como lo indica el título del disco, ‘’suite’’, compuesta por un sinfín de fragmentos e invenciones diversas unidas en una sola pieza, recreando así una enorme exploración donde convergen el jazz, el funk y el soul.

Queda indefinida la cualidad de la unión de las diversas y continuas partes y sub partes que se presentan en un continuo de avanzada a lo largo de toda la suite, por momentos no parece más que el acercamiento de diversos fragmentos que se unen con suerte con algún efecto remixado o algunos agregados sonoros que funcionan como una suerte de conector donde se disuelve el fragmento que termina y de donde surgirá el fragmento siguiente a continuar, pero lo cierto es que, de todas formas, se trata  de una obra muy ambiciona y compleja que no se detiene jamás a lo largo de sus cuarenta minutos de duración y que presenta continuamente partes y más partes en un torbellino de creación jazzera, muy sutil y suave.

La complejidad es abrumadora y a su vez atípica para este estilo que generalmente se diversifica en pistas más convencionales y bases no tan ‘’progresivas’’ si se quiere. La calidad técnica es también sorprendente, demostrando una enorme gama de instrumentaciones diversas entre varias percusiones agregados instrumentales, buen sabor de jazz, estilo percusivo proveniente del funk, armonías parecidas al soul, y agregados sonoros diversos que enriquecen el caldo de cultivo primordial y que enaltecen el resultado final como una suite muy diversificada hacia lugares poco esperables pero muy disfrutables.

El encargado de los arreglos y la producción es el mismísimo Madlib, productor de múltiples géneros y instrumentista. Hijo del cantante de soul Otis Jackson Sr., hermano mayor de Oh No, y sobrino del trompetista de jazz Jon Faddis. Madlib, en su función de productor multifacético de diversos proyectos de variada índole, da vida a The Last Electro-Acoustic Space Jazz & Percussion Ensemble, formado tras la disolución en 2007 de su proyecto Yesterdays New Quintet, como un ensamble más para dar vida a su prospera producción musical, dotándole de un virtuosismo compositivo plasmado con influencias del hip-hop, lounge, además del jazz nombrado jazz, apareciendo además esa sensación de jazz fusión afro tipo el Miles Davis de los 70s, acercándose a ese estilo del Bitches Brew y ese estilo del Davis de ese momento. Este proyecto fue publicado en una edición privada y limitada y solo estaba disponible en una cantidad muy pequeña de ediciones promocionales.

Es una suite de verano con todo el sabor de la época reflejado en agregados de audio de voces y juergas típicas, el sabor jazzero fusión y lounge cool de una música de fondo perfecta para amenizar reuniones agradables, pero con un nivel de producción en la composición que la vuelve además una pieza de colección digna para los fanáticos del under del hip-hop que les agrada degustar de un sonido que se sale de los cánones y se divisa como un experimento sobresaliente del under.

Madlib (nacido como Otis Jackson Jr. el 24 de octubre de 1973 en California) es un DJ, multiinstrumentista, rapero y productor musical de California nominado al Grammy. Conocido bajo una plétora de seudónimos, es uno de los productores de hip hop más prolíficos y aclamados por la crítica de la década de 2000 y ha colaborado con una gran cantidad de artistas de hip hop, incluidos The Alkaholiks, Mos Def, De La Soul, Ghostface Killah, Talib Kweli , AG, MF DOOM (como Madvillain) y el difunto J Dilla (como Jaylib).

Cod: #1740

9 jun 2023

Nicholas Payton - Sonic Trance (2003)

Este disco de fusión que en parte replica los sonidos vanguardistas de la época funk de Miles y la época electrónica de Hancock, y ha bebido muy bien de esa tradición setentera pero la ha replicado a la era moderna, por lo que los ritmos se ha vuelto más estrechos y directos, los sonidos más limpios, pero por suerte la experimentación se redobló, en este caso, con el uso de las nuevas tecnologías y las miras hacia pasados donde verse reflejados, por lo que la experimentación cumple un rol importante en este sonido.

El trabajo abre con unas palabras en inglés que perjuran un ‘’sonic trance, sonic trance…’’, como anunciando un viaje prometedor en el que las funciones de los músicos serán las de estar en un trance o, en su defecto, generar un trance en el oyente, en todo caso ese trance ya no será con una vanguardia cósmica, o con un libre albedrío cacofónico, o con una sesión instrumental orgánica afro futurista. ‘’Sonic Trance’’ se acerca a una visión moderna donde se le injerta un barniz de hip-hop, por lo que a menudo en el disco hay algunos sampleos o insinuaciones y guiños hacia otras piezas históricas del jazz o voces en algún especie de improvisación vocal.

El ‘’Trance’’, por lo tanto, sigue estando allí, entre búsquedas experimentales, sampleos, algunas percusiones agregadas, el virtuosismo de los ejecutantes que vuelven a las improvisaciones en proezas a degustar cuidadosamente, una búsqueda de estilos muy amplia que hace que las dieciocho piezas que componen el disco, un viaje de más de una hora, sea una aventura completa que desfila por un sinfín de tramas e inventos de variada manufactura y textura fusión. 

El disco está lejos de ser un disco promedio en un discografía de jazz básico, este trabajo es un experimento en sí mismo, con melodías abstractas de vanguardia, momentos de yeites a tradiciones con mezclas de fusion, sampleos, guiños al hip-hop, instrumentaciones virtuosas, impecables, Payton soplando sobre ritmos comprimidos e irregulares, cuando otros momentos son más relajados, conmovedores y suaves.

Hay también una sensación de uso expansivo de la instrumentación, entre trompetas y teclados de época,  el sonido puede volverse deliciosamente desordenado entre las improvisaciones modernas, los guiños hacia los hitos, y los sampleos sintéticos que se mezclan entre tanto. Si buscan hip-hop jazz lo encuentran más especialmente en la loca pieza ‘’Stinkie Twinkie [Remix]’’, que a su vez se conecta con las siguientes en una combinación de experimentaciones deliciosas. Este es un disco doble, ya hacia la segunda parte del mismo se hacen presentan algunos momentos hip-hop más marcados, con percusiones jazz adecuadas a tempos pegadizos, armonías en teclados, y líneas de viento que juegan entre vanguardias dispersas en el aire, logrando generar el conjunto un sonido múltiples formas en una sin perder las cadencias rítmicas hipnóticas del hip-hop, un invento muy agradable. 

A lo largo del comienzo de su carrera, el trompetista Nicholas Payton ha estado en estilos sobre las tradiciones de su ciudad natal de Nueva Orleans. Sin embargo para ‘’Sonic Trance’’ de 2003, ha dado a conocer un nuevo enfoque, un cambio radical que se salta varias décadas al deslizarse hacia la era moderna, renovando su repertorio, adicionando estilos modernos para esa época, y enfocando la instrumentación de su conjunto para adecuarlas a fusiones más amplias pero estrictas y virtuosas.

Aquí algunas palabras de Payton sobre sus nuevos sonidos en aquellos años: ‘’Como siempre, mi deseo es llegar a la mayor cantidad de gente posible. Independientemente del tipo de disco que haya hecho, siempre he tenido eso en mente. Siempre traté de crear lo que pensé que era música buena, algo que se sintiera bien, algo que los inspirara a bailar o reflexionar, si querían. Ese siempre fue el objetivo, por lo que el nuevo álbum es algo en lo que he estado trabajando durante bastante tiempo. Para mí, no es una sorpresa. Parece la progresión natural desde donde quería ir. Si miras ciertos elementos de mis discos, en términos de mi amor por el R&B en el pasado, he grabado canciones y hecho versiones de canciones dentro del idioma. He incluido muchas texturas diferentes en mis discos. Para mí, esta es la progresión natural desde donde me dirigí durante un tiempo. Es una música muy orientada al ritmo, sensual y para sentirse bien. Puedo ver que la idea de que no sea un llamado "disco de jazz" puede ser discordante para algunos, pero creo que está dentro de la tradición de los discos de Nicholas Payton.’’

Cod: #1739

8 jun 2023

Elephant9 - Dodovoodoo (2008)

Elephant9 es una banda noruega, un trio nacido en el 2006, en Oslo, de jazz rock bastante ecléctico, ellos supieron crear un estilo realmente propio. Inicialmente se hacían llamar ‘’Storløkken / Eilertsen / Lofthus’’. Nombres correspondientes a los miembros de la banda, Ståle Storløkken ( teclado ), Nikolai Eilertsen ( contrabajo ) y Torstein Lofthus, pero cambiaron el nombre a Elephant9 después del primer año juntos.

El trío lanzó su álbum debut ‘’Dodovoodoo’’ en 2008, grabado en vivo en cinta analógica en los Grand Sport Studio, en Oslo, en Noviembre de 2007. Tratándose de una música fusión en la que convergen jazz, rock, y toda su imaginería instrumental progresiva, derivándose en un sonido netamente personal y propio, sesiones instrumentales en las que van derramando todo lo que saben y la fusión que saben desprender, que es de un enorme nivel. 

Las piezas en su mayoría tratan de atascos semi improvisados, atascos rabiosos y con furia, un sonido que aplasta todo a su paso y que no baja jamás de su intensidad, sobrecargando el audio de efectos, órganos hammond y libre-improvisaciones abrumadoras. Un estilo fusión ejecutado con mucho ímpetu y mezclado con funk y psicodelia, todo desarrollándose en una atmosfera instrumental neta de desborde instrumental e improvisación, un envase libre y casi sin estructuras.

Por momentos, por el sonido tan característico arrancado al órgano Hammond, recuerdan a algunos emprendimientos psicodélicos de los 60 o 70, similares por ejemplo a un disco homónimo extraño llamado CHILLUM, un disco 1971. Algunas alegorías similares parecen surgir de la época, se acercan a algunos delirios propuestos por el Miles Davis de los 70, entre funk, free jazz y solos libres.

El sonido se mantiene álgido de principio a fin, la sesión rítmica es consistente aun en los pasajes improvisados y más calmos, lo que le da el toque contemporáneo, a un sonido que a la vez tiene mucho de los 60 y 70, en especial por la implementación de órganos hammond y sintetizadores, por parte de Ståle Storløkken. 

Comienza con un alto ritmo y el tempo casi nunca se relaja en todo el álbum, con la excepción de "Hymne", una pieza lenta y solemne interpretada en órgano, pero eso es sólo una desaceleración muy temporal, para que la maquinaría retorne a toda potencia en el resto de las pistas. 

Musicalmente se acercan a Weather Report, Medeski, Martin and Wood, Miles Davis, o incluso recuerdan sutilmente a Emerson, Lake & Palmer, pero son sólo superficiales estos acercamientos, Elephant9 cuenta con su propio ímpetu y su propio poderío, creando su propia fusión con improvisaciones, potencia y muchos sonidos rústicos. A pesar de la naturaleza cooperativa y democrática de Elephant9, es Storløkken quién es la estrella más clara. Considerado durante mucho tiempo uno de los más grandes tecladistas de improvisación de Noruega, interviene y dirige en el disco, como el instrumento principal del trio, y lo hace de una manera formidable.

Más tarde seguirían con los discos ‘’Walk the Nile’’ en 2010, disco que fue galardonado con el premio Spellemannprisen 2010, y se ha hecho que la banda ganara su lugar de honor dentro del fusion de todo el mundo. En su tercer álbum de estudio de ‘’Atlantis’’ , lanzado en 2012, contaron además con el apoyo del veterano guitarrista Reine Fiske, y fue acompañado por una serie de conciertos en el Festival de Jazz de Kongsberg , y en otros festivales de Noruega como "Union Scene" y "Victoria, Najonal Jazzscene".

Cod: #1738

7 jun 2023

Magic Brother & Mystic Sister - Magick Brother & Mystic Sister (2020)

Para los amantes del prog y fusión, este disco no puede ser más que una delicia: instrumentaciones precisas que se acercan al virtuosismo, búsquedas progresivas cambiantes en piezas con mucha preponderancia instrumental, atascos con buenas improvisaciones y adornos melódicos, jazz rock y fusiones con sabores varios, riffs pegadizos, psicodelia de alto vuelo, etc., todo un repertorio de buen gusto que genera al final un buen sabor musical y deja en el aire una escucha muy agradable que enaltece al presente del genero progresivo.

Aquí hay mucho por escuchar, hay atascos improvisados, estructuras cambiantes, también rock prog, influencia del Canterbury, y aunque la instrumentación es prístina por otra parte no se vuelven virtuosos al nivel de otras bandas frías y técnicas que no transmiten nada, aquí más bien utilizan la sofisticación a su favor, con sabores y fusiones utilizan la paleta sonora con riffs y elementos que invitan a bailar, a sentir y ser felices, e incluso hay en un par de pasajes algunos elementos que recuerdan al latin rock y enaltecen esa sensación de sabor y gusto por los buenos atascos.

El trabajo en general es entretenido, con su propia belleza característica y una especie de atemporalidad de esos discos modernos que no se sabe si salieron en realidad del presente o de hace cincuenta años atrás cuando las bandas no solo hacían prog rock sino que habían bebido de fuentes enormes para crear sus fusiones, esa es la sensación que deja Magic Brother & Mystic Sister, la de que no solo están bien formados técnicamente sino también la de estar bien informados sobre lo que pasó y pasa en el género progresivo y aledaños. 

Por momentos parece estar sonando Pink Floyd, o Santana, o cualquier banda de la época dorada del Prog o el Canterbury, pero también no parecen estar copiando burdamente a otros, sus composiciones complejas y sentidas dan prueba de ello, y todo su álbum se mantiene en ese nivel de sofisticación.

Las composiciones son realmente complejas y ofrecen una aventura en cada track, con una imaginación desbordante que hace de cada pista una aventura que recorre un sinfín de momentos internos. Los encargados de crear esta aventura son Eva Muntada en piano, sintetizadores, organo, mellotron y voz, Xavi Sandoval en bajo y guitarras, Marc Tena en batería y voz, y Maya Fernández en flauta.

Magick Brother & Mystic Sister son una banda oriunda de Barcelona, España. La historia de su origen se remonta al año 2000 cuando Eva (teclados/voz) y Xavi (bajo/guitarra) conocieron a Daevid Allen en un festival de Canterbury donde tocaban Gong, Kevin Ayers, Caravan y Arthur Brown. A ellos se le sumaron en 2013 Maya (flauta) y Marc (batería) para formar la banda completa como un cuarteto.

El nombre del grupo y de su primer disco homónimo, ‘’Magick Brother & Mystic Sister’’, proviene en realidad del primer disco de la banda inglesa Gong, también llamado ‘’Magick Brother & Mystic Sister’’, aunque esta no está ni cerca de ser una copia o un intento, de hecho no suenan tan parecidos a Gong. De todas formas la influencia del sonido Canterbury está clara, con trazas de jazz, improvisaciones y estructuras armónicas entre cambios y velocidades.

Este emprendimiento es una escultura de auras plasmadas en terrenos de jazz y rock, donde la alegoría espacial y las búsquedas canterburyanas fluyen en la sangre que también está compuesta por una belleza de flores campestres, psicodelia deliciosas y magias del bosque. Un bello sonido que nos confirma que la magia aun existe.

Cod: #1737

6 jun 2023

Bley-Peacock Synthesizer Show - Revenge ''The Bigger The Love The Greater The Hate'' (1971)

Otro disco de vanguardismos en el jazz rock, un trabajo codiciado en su tirada original en vinilo de época, propio de un dúo que dio varios frutos discográficos como solistas por separado o como producto de su colaboración, siendo este disco otro de sus aportes, entre jazz, rock, experimentación electrónica, vanguardias, y nuevas creaciones en terrenos del rock, rock vanguardista en síntesis.

Annette Peacock es una cantante de vanguardia muy relacionada a la electrónica de punta y a la cancion, además de ser letrista, compositora, arreglista y productora estadounidense de vanguardia y jazz. Casada con el bajista Gary Peacock, luego divorciada. Estrechamente asociado con el pianista Paul Bley después. Se la considera una pionera de la música electrónica, sus primeros experimentos con el sintetizador Moog dieron paso al proyecto Bley-Peacock Synthesizer Show.

Dicho proyecto presentaría un único trabajo, único bajo ese nombre pero no sería el único bajo este dúo de innovadores. ‘’Revenge. The Bigger The Love The Greater The Hate’’ de 1971  es prácticamente un invento propio de sus creadores, un disco que para los amantes del rock puede funcionar muy bien y también para los seguidores más imaginativos y abiertos del jazz de vanguardia.

Este dúo luego daría más material que escuchar, mucho más amplio y en terrenos más libres dentro de aires del jazz, aunque en esta ocasión empezarían trabajando en música experimental relacionada al rock y especialmente relacionada a la canción, un trabajo donde se nota la producción y la mano creativa de Annette Peacock, quien compuso y arregló los temas, aunque por supuesto la mano de Paul Bley también se ve reflejada en el sonido.

El trabajo presenta afortunadamente varia escenas de vanguardias, varios momentos que notable diferencia entre sí pese a la vanguardia unificadora de los dos artistas. Annette Peacock participa primordialmente en voz (acústica y sintetizada), Moog, vibráfono eléctrico, arreglos y producción, y Paul Bley en teclados, piano eléctrico y sintetizador (Moog, ARP y Neurona Omnivola). 

Ellos dos, más un electro de grandes ejecutantes, presentan una mezcla entre el rock funk de ‘’A Loss Of Consciousness’’, el rock vanguardista de ‘’I Belong To A World That's Destroying Itself’’, y otros momentos de desconcierto entre ‘’The Cynic’’ o ‘’Mr. Joy’’.

Siendo un álbum que presenta mucho, hay varias pistas de diferente manufactura de producción, pero en general está la puesta a punto electrificada y electrónica en todo el trabajo, que salvaguarda al sonido y le da ese toque innovador al asunto, con armonías de jazz electrónico y voces también filtradas por sintetizador, lo que le da un carácter único al disco, con  Annette cantando con efectos muy extraños y hasta agregando solos y efectos vocales también muy particulares exclusivos de este disco.

Una pieza producto de la creación de Annette es ‘’Im The One’’, que está precedida por la pista ‘’Climbing Aspirations’’ que funciona como una suerte de preludio instrumental muy extraño para introducción al susodicho tema nombrado que también innova entre balada soul romántica con varias partes internas y la siempre innovación electrónica, otro momento único, con el detalle de que la pieza fue replicada también en el disco solista de Annette Peacock ‘’I'm The One’’, de 1972, estando para esa ocasión las pistas ‘’Climbing Aspirations’’ y ‘’Im The One’’ unificadas en una sola.

‘’The Cynic’’, ‘’Mr. Joy’’, ‘’Daddy's Boat’’ y ‘’Dreams’’, tracks que completan el disco y que son de extraña manufactura, difíciles de definir, son creaciones oscuras cual baladas perversas electrónicas, con ambientes perversos y arreglos electrónicos, inventos, creaciones propias de estos innovadores de vanguardia.

En 1972 aparecería otro álbum creado por el dúo, el ‘’Dual Unity’’, ya presentando otro sonido que se sale de la canción pero siguiendo una línea que invoca a los dos creadores, tanto Annette Peacock como Paul Bley, en un sonido siempre indefinido, indefinible, dificil de ubicar si en el jazz o el rock, tal vez no sea nada de eso, siempre manteniéndose entre lo electrónico de sus inventos, sus innovaciones, sus exploraciones, y un talento unido en el vanguardismo y la electrónica que dejó trabajos muy interesantes.

Cod: #1736

4 jun 2023

Bob Downes Open Music - Hells Angels (1975)

Siguiendo la línea de los trabajos que venía publicando, Bob Downes presenta su ‘’Hells Angels’’ de 1975, el último trabajo de esta etapa de su carrera en la que prácticamente hizo lo que quiso, como quiso y cuando quiso, siempre en terrenos del jazz pero llevando al género a lugares insospechados incluso para su coterráneos de la escena inglesa progresiva y vanguardista.

El sonido del disco es en parte una decantación de todas sus experiencias previas, en tanto a jazz libre, vanguardismos, búsquedas libres sin estructuras fijas, momentos solos de flauta, jazz rock, arreglos orquestales, etc., en síntesis, la experimentación típica de la casa para un Downes que hizo aportes enormes al vanguardismo inglés pero que no fue del todo apreciado por la escena Cantarbury.

Era la época más prolífica de Bob Downes en cuanto a discografía y exploración musical, habiendo experimentado ya para la época con música de cámara para flauta, jazz rock, música de biblioteca, música abstracta, vanguardismo, y otros inventos, etc., y para este disco aparecería un nuevo invento, ya que en la primer pieza del disco, la llamada ‘’Hells Angels (a visit to the devil)’’, se puede escuchar una nueva arremetida imaginativa, habiendo jazz-rock y siguiendo con una combinación entre jazz libre y elementos electrónicos, un muy interesante experimento, una pieza sofisticada, progresiva, que transita por varias partes. 

Este interés de combinar jazz y electrónica ya había sido emprendido en la época por el prodigio George Russell en sus obras vanguardistas, o sino también por otros como Freddie Hubbard, Paul Bley o el mismísimo Sun Ra, todos vanguardistas del jazz. Bob Downes no podía dejar de ser quien emprendiese ese experimento en Europa.

En cuanto a la concepción estructural, el disco está pensado de forma conceptual, con una pieza de diecisiete minutos de duración que ocupaba originalmente todo el primer lado del disco y siendo ejecutada por los once lementos de la banda entre metales y grupo de rock, la ya nombrada ‘’Hells Angels (A Visit To The Devil)’’. Mientras que la lado segundo del disco estaba ocupado por una serie de piezas más cortas pero no menos considerables, cinco piezas para la segunda mitan del trabajo.

En la segunda cara del disco Downes sigue experimentando con las sesiones de jazz libre, entre jazz rock y sesiones de libre ejecución, demostrando que estaba a la altura de ejecutantes libres europeos como Evan Parker y Peter Brotzmann. Predominantemente ejecutado por el trio de jazz, las ejecuciones son más estándar aunque muchas veces se salen de la formula básica del jazz para enroscarse en formas más libres en cuanto a estructura, armonía e improvisación.

Desde su lanzamiento solista de su ‘’Open Music’’ de 1970, siendo un álbum ganador de premios y ubicándolo como el mejor flautista de Inglaterra, Downes ha demostrado una profundidad conceptual enorme en sus obras. ‘’Hells Angels’’ es el producto final de una travesía sin igual en Inglaterra, que con su ‘’Open Music’’ y bajo su sello Openian llegó a explorar y presentar, transitando por varias facetas. Downes se retiró de su ‘’Open Music’’ después del lanzamiento de ‘’Hells Angels’’, siendo lo último que publicaría hasta después de varios años  en la década y las décadas siguientes.

"South American Journey" e "Inside Stonehenge" son algunos de sus albumes siguientes ya aparecidos en la decada de los 80s. Bob Downes se mudó al continente a finales de los 80 y ahora tiene su sede en Alemania, y continúa actuando como solista, tocando durante la ejecución de pinturas y exposiciones de arte, organizando talleres de flauta y lanzando algún que otro álbum de vez en cuando, "Sueños de la Naturaleza" de 1993.

Cod: #1735

2 jun 2023

Donald Byrd - Electric Byrd (1970)

El Pájaro Eléctrico emana su campo electromagnético de vibraciones alfa y moviliza las ondas subsecuentes, que lo circundan, en ráfagas que priorizan el avanzar por el espacio interior y exterior, no deja nunca su viaje porque su movimiento por el espacio-tiempo es su maldición y su razón de ser, recibe señales de lugares lejanos ya que su cuerpo magnético está compuesto por capas que se subyugan en un efecto de composición aurea y que reflejan el contenido de su misión, de su viaje y de la esencia de lo que lo rodea. El Pájaro Eléctrico vuela por entre todos nosotros esparciendo así la semilla de lo misterioso!

En una era de cambios, ebulliciones, influencia de la psicodélia obre el jazz, una era marcada a fuego, en el terreno del jazz, por los nuevos sonidos del Miles eléctrico del Bitches Brew, continuaban apareciendo elementos que ayudaban a realizar el trocar de los sonidos psicodélicos hacia una transición a lo progresivo. En este terreno el Electric Byrd de Donald Byrd amortiguó de buena manera los efectos de los nuevo sonidos de Miles y, con un elenco de elite, pudo proponer incluso nuevos aires dentro de las nuevas formas del jazz, que eran los viajes hacia las extensísimas sesiones fusión entre aires eléctricos, psicodelias espirituales y viajes cósmicos hacia afro-futurismos y nuevos sonidos de punta.

Electric Byrd se suma a la tendencia del experimentar eléctrico, con un fusión suave que sabe a dónde va y encuentra nuevos aires en algo en lo ya que se había comenzado a experimentar. Es uno de los discos más llamativos del Donald Byrd de la época y seguramente el mejor de su periodo fusión, proponiendo cuatro extensas pistas que rondan los diez minutos cada una y que ofrece una suavidad pocas veces vista en el fusión. Todo está perfectamente planeado pese a las improvisaciones, no hay excesos en la distorsión, es equilibrado y circula con ritmos funky en un andar que agrada y envuelve inmediatamente tras la primera escucha.

Pese a ser un disco de vanguardia, innovaciones y fulguraciones en terrenos del fusión temprano, la característica de este trabajo no es un vanguardismo extremo como el Bitches Brew, para ser en cambio el Electric Byrd una propuesta con cierto antagonismo que utiliza un costado más racional del funk y más convencional de la sesión extendida, siendo tan orgánico hasta donde la improvisación le permite pero sin caer en excesos de libre albedrio, todo está muy bien planeado y finalmente queda un aire de que se ha recorrido mucho y viajado bastante, especialmente por las extensas duraciones, las tramas progresivas de las composiciones y las muy buenas improvisaciones.

También cabe destacar esa característica tan ‘’cosmic’’ que posee el sonido, originada con ecos y efectos en las instrumentaciones, además de estar relacionada y explayada esa sensación en las extensas sesiones improvisadas de jazz progresivo surgido de los sutiles cambio en las composiciones. Aires místicos, viajes siderales, emprendimientos de ambición improvisadas que fluyen como ondas y que incluso han logrado que algunos tildaran a este disco de algo así como  ‘’jazz psicodelico’’, por ser un sonido que flota sobre el piso, vuela con empuje propio y contiene un misterio muy agradable.

El elenco que participó de la grabación del disco estuvo integrado por estrellas nivel top mundial del jazz de la época, lo que hace de este disco un inequívoco artefacto que e ubica entre los mejores discos fusión del momento. De aquí participaron: Donald Byrd en trompeta, Jerry Dodgion en saxo y flauta, Frank Foster en saxo y clarinete, Lew Tabackin en saxo tenor y flauta, Pepper Adams en saxofón barítono y clarinete, Bill Campbell en trombón, Hermeto Pascoal  en flauta (solo en "Xibaba"), Wally Richardson en guitarra, Duke Pearson en piano eléctrico, Ron Carter en bajo, Mickey Roker en batería y Airto Moreira en percusión.

La presencia de figuras de la música fusión brasilera, como Airto en percusión y Hermeto Pascoal en flauta (solo en "Xibaba"), incrementan la solidez del All-Star y adicionan esa cuota tan enriquecedora e icónica como les es posible y que proviene del sabor de la samba y el fusión brasilero. Airto deja algunos buenos sabores con su berimbau en la pieza ‘’Essence’’ pero principalmente aporta su composición ‘’Xibaba’’ (que también publicaría en su disco solista ‘’Natural Feelings’’ ese mismo año), que enriquece el disco, le da nuevos aires, nuevos sabores, una cuota de samba fusión que era una pequeña tendencia que logró figurar entre la alta esferas del fusión mundial.

La condición de ‘’electric’’ en el titulo representa un cambio hacia una nueva tendencia de la época, desarrollada de forma personal y no vana, más pop, más orgánico pero complejo, más funky, más ligero, más suave en un trabajo de armonías impecable. Muchos de los discos de la época aun suenan frescos y difíciles de imitar, este es uno de ellos, por las tendencias cambiaron, las vanguardias transmutaron hacia otros lares, y el jazz de grandes obras se modificó en nuevas vanguardias modernas.

Cod: #1734